Incertidumbre y Ansiedad

Tiempos difíciles        

          Vivimos en tiempos donde la incertidumbre parece quitarnos la paz y la tranquilidad. Son muchos los factores que la alimentan, como la situación de salud que el mundo esta atravesando, los conflictos políticos y sin mencionar detalladamente los retos personales que cada uno pueda experimentar. En fin, me parece que la incertidumbre para muchos ha sido tan constante que no estamos conscientes de su presencia.

Ansiedad normal vs. Ansiedad patológica

         En momentos de incertidumbre se pueden exacerbar muchos síntomas. Entonces, es hay donde puede manifestarse el fenómeno de la ansiedad. La ansiedad se puede definir como un estado displacentero ante un peligro impreso. Cuando la ansiedad es directamente proporcional ante un evento se puede considerar como ansiedad normal según Rollo May. Por otro lado, si esta representa una sintomatología fuera de proporción se puede considerar como ansiedad patológica. Esta diferenciación es necesaria ya que todos de alguna manera experimentamos ansiedad y eso no significa que necesariamente padezcamos de alguna psicopatología.

Sin miedo en buscar ayuda 

       En este terreno son varios los factores a considerar y por ello hay que tener cuidado con no auto-diagnosticarse. Si estas experimentando algunos síntomas como pensamientos de peligro, sensación de aprensión, reacciones fisiológicas y movimientos motores relacionados con la ansiedad, te recomiendo que visites a un profesional de la salud mental que pueda ayudarte en atravesar tus retos. Te exhorto a que no pierdas de vista tus fortalezas y el rol protagónico del significado y propósito de tu vida. Los problemas son temporales y tienen solución, por eso son problemas. Te animo a que no pierdas la fe y la esperanza en tiempos difíciles.

        En tiempos de incertidumbre hay un texto bíblico que siempre me bendice y esta en Filipenses 4: 6-7:  No se inquieten por nada; más bien, en toda ocasión, con oración y ruego, presenten sus peticiones a Dios y denle gracias.  Y la paz de Dios, que sobrepasa todo entendimiento, cuidará sus corazones y sus pensamientos en Cristo Jesús.

Referencias:

May, R. (1967). The meaning of anxiety. Psychosomatic Medicine, 14(3), 237.

Nueva Versión Internacional, Filipenses 4:6-7

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